HOTEL VILLAJARDIN - Portomarín, Lugo

Laura Vega Arquero

Su ubicación es ideal ya que está situado justo detrás de la plaza del pueblo y las habitaciones tienen un buen balcón con vistas preciosas al lago. La joven de recepción fue muy atenta todas las veces que hablé con ella.

PERO: La limpieza deja mucho que desear. El edredón no tiene funda y se veía suciedad en él. El agua del baño sale marrón sucio (confirmado con otros peregrinos alojados en el hotel, no solo me pasó a mi). No me pude lavar el pelo porque me dio bastante asco. Los dientes tuve que lacármelos con agua embotellada por la misma razón. Mi habitación estaba justo al lado del cuarto de máquinas y tuve ruido toda la noche. Fue el hotel más caro de mi camino y no repetiría. El desayuno que puedes pagar en el hotel por 10€ era demasiado sencillo, lo justo para tomarte un café y una tostada.

Juanjo B

Había reservado albergue pero solicité cambio a habitación y me lo concedieron , además pedí vista a la ría y también fue posible. En la cafetería del hotel tomamos un excelente pulpo a feira servido por un camarero súper educado , servicial y amable , de origen brasileño. El chico de la recepción también un 10.

Javier Ascaso

El albergue muy recomendable, las habitaciones separadas en camas de seis y con funda de almohada y sábana en la cama. Todo muy limpio y el personal bastante amable. 15 euros. Baños, duchas en buen estado

Julia L

En Portomarín se llenaron casi todos los albergues y la única opción que nos quedó fue alojarnos en el albergue que ofrece este hotel, donde solo se puede reservar vía pagina web del propio hotel o por teléfono. A mi me resultó un poco raro que no estuviera publicado en ningún sitio, y creo que las condiciones que ofrece el albergue, no son las más favorables para vivir allí. Para empezar, el albergue estaba en la planta de abajo del hotel, en el sótano vaya, había dos habitaciones, una de 8 personas y otra de 12 personas. Había muy poca ventilación, es verdad que dentro de las habitaciones había ventanas, pero en el baño, la sala de estar y la cocina, absolutamente nada. Al entrar al baño para ducharnos, encontramos ropa interior, suponemos de otros peregrinos que habían estado anteriormente porque llegamos los primeros al albergue, y ahí nadie había estrenado la ducha, lo cual dice bastante de la limpieza. También se atascaron dos de los tres baños de chicas, uno de ellos cuando llegamos ya no iba la cadena. Por otra parte, es cierto que está muy bien ubicado, los empleados son amables y cualquier cosa que necesitas, te la resuelven.

María del Carmen Cañadilla

He estado alojada aquí con mi familia tras la primera etapa del camino de Santiago y hemos quedado encantados con el hotel.

Las habitaciones son muy grandes y están muy limpias. La atención del personal es estupenda, en especial la señora más mayor del restaurante, que nos atendió la comida y por la tarde.

Muchas gracias por tan buena atención

María González Cañadilla

Un hotel muy limpio y fresco. Pero lo mejor de todo es el personal: súper acogedor, especialmente las dos mujeres que nos ayudaron en la zona de restaurante. A mi madre le guardaron parte de la comida para la cena sin ningún problema

Marta García García

Nos acogieron muy bien desde el principio, éramos un grupo de 6 personas, con 2 habitaciones triples. Muy limpias, con todo lo necesario. Cuentan con una salita de descanso dindehhay una maquina para dar masaje en pies y piernas por 2 €, nos vino muy bien , para relajar las piernas cansadas.
En recepción muy simpáticas , nos aconsejaron sobre el camino.
Estuvimos muy bien.
El baño con secador .
Muy bien

Marialys R. Aguilera

Mi opinión es acerca del albergue. Estoy haciendo el camino De Santiago con una agencia que me organizó los albergues y justo hice mi segunda parada en el Albergue Villamartin, cuando los busqué por Google no aparecía la ficha del albergue, lo cual me generó bastante confusión, pregunté en el Hotel Villajardin (por descarte) y efectivamente me dijeron que era ahí. El recepcionista fue amable y breve, nos indicó que el albergue estaba en la planta de abajo (como en el sótano) y cuando bajé me dio bastante mal rollo, parecía un antro subterráneo, las duchas insalubres, con moho incluso, no tenía ningún espacio para colocar las cosas de aseo personal y era bastante incómodo ducharse ahí. No lo recomiendo para nada, un albergue de carretera es mejor que este sitio seguramente. Por otro lado, lo único bueno a destacar es el personal, tanto el recepcionista como el camarero del bar fueron bastante agradables y lo único bueno de mi estancia.